Durante el período de la Alimentación Complementaria (AC), los niños se encuentran en un riesgo elevado de desnutrición.
Con frecuencia, los alimentos complementarios son de baja calidad nutricional y son administrados demasiado antes o demasiado tarde, en cantidades muy pequeñas o poco frecuentes.
La alimentación complementaria hace referencia a un periodo en el que se introducen de manera gradual alimentos diferentes a la lactancia materna, y no a una enumeración de alimentos a introducir a edades predeterminadas.
Existen múltiples diferencias en la forma y edad de introducción según el área geográfica, la tradición cultural e, incluso, la situación socioeconómica.
Por lo tanto, ¿A qué edad debe iniciarse la AC? y ¿Qué y en qué orden deben introducirse los diferentes alimentos?. Para responder a estas cuestiones hay que valorar a cada lactante individualmente.
Con frecuencia, los alimentos complementarios son de baja calidad nutricional y son administrados demasiado antes o demasiado tarde, en cantidades muy pequeñas o poco frecuentes.
La alimentación complementaria hace referencia a un periodo en el que se introducen de manera gradual alimentos diferentes a la lactancia materna, y no a una enumeración de alimentos a introducir a edades predeterminadas.
Existen múltiples diferencias en la forma y edad de introducción según el área geográfica, la tradición cultural e, incluso, la situación socioeconómica.
Por lo tanto, ¿A qué edad debe iniciarse la AC? y ¿Qué y en qué orden deben introducirse los diferentes alimentos?. Para responder a estas cuestiones hay que valorar a cada lactante individualmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario